Asociación de plásticos
oxo-biodegradables

Organización sin ánimo de lucro limitada por garantía.
Registro de UE N.º: 370641927438-79

 


La nueva economía del plástico. Replanteamiento del futuro del plástico

Si aplicamos los principios de la economía circular al empaquetado con plásticos mundial, podríamos transformar la economía del plástico. Sin embargo, debemos avanzar un paso más.

El plástico inteligente oxo-biodegradable (OBP) debería entenderse como parte de una estrategia global para mejorar el medio ambiente y son totalmente coherentes con los principios de “Reducir”, Reutilizar” “Rediseñar” y “Reciclar”

RESUMEN

  • Los residuos plásticos son un grave problema medioambiental.
  • Los microplásticos surgen como consecuencia de la fragilidad y erosión del plástico corriente, dando lugar a fragmentos plásticos que pueden permanecer en la superficie o estar flotando durante décadas, absorbiendo toxinas.
  • Debemos dejar de usar plástico ordinario en artículos cotidianos.
  • Es urgente que los artículos de plástico de uso diario se modernicen con la tecnología del OBP para que, en caso de terminar en el medio ambiente exterior, se degraden y biodegraden de forma segura, en un periodo de tiempo mucho más reducido
  • Es de importancia suma comprender que el OBP no es que solo se fragmente en trozos de plástico más pequeños se fragmenta, sino que se transforma, al final de su vida útil, en un material de bajo peso molecular que ya no tiene calidad de plástico y que se recicla, volviendo a formar parte de la naturaleza a través de bacteria y hongos presentes de manera natural.
  • Los impuestos sobre las bolsas, así como los incentivos para reducir desperdicios y reciclar no son suficientes, pues cientos de toneladas de plástico tradicional encuentra su paso hacia el medio ambiente a diario, dando lugar a los microplásticos.
  • El OBP se biodegrada tanto en agua como en tierra y no deja residuos dañinos.
  • El OBP cuesta poco más o lo mismo que el plástico tradicional y puede fabricarse en la misma fábrica utilizando las mismas máquinas, por lo que no se produciría ninguna pérdida de puestos de trabajo.
  • El OBP puede contener un indicador para que el equipo de separación de basura pueda identificarlo, aunque no es necesario. El OBP puede reciclarse junto con el plástico tradicional, si se recoge durante su vida útil para reciclar, cosa que no puede hacerse con el plástico derivado de plantas (bioplástico)
  • El OBP se elabora con un subproducto del refinado de petróleo por lo que no afecta a la cantidad de petróleo extraído, sería extraída la misma cantidad incluso si no existiera. No hay necesidad de cambiar al plástico biodegradable vegetal que es caro y que requiere un elevado consumo de recursos naturales, particularmente agua, tierra y combustibles fósiles además de hasta el 70% de su composición deriva del petróleo
  • Si nos preocupa la basura, entonces el bioplástico es la solución equivocada porque solo se ha ensayado su biodegradación dentro de una unidad de compostaje industrial, no en el medio ambiente exterior.1 Ni tampoco se convierte en compost, sino que pasa a ser CO2.
  • Es importante comprender que el plástico oxo-biodegradable no es un producto completamente nuevo sino que es plástico común modernizado de tal manera que no permanecerá tirado en el suelo o flotando en el medio ambiente durante cientos de años.

Nuestra asociación apoya completamente la idea de economía circular para el plástico; el OBP cumple totalmente con dichos principios. Igualmente, apoyamos un nuevo diseño para el plástico, la reutilización de éste y su reciclaje.

En estos momentos, y para la mayoría de sus aplicaciones, el plástico es la mejor opción en cuanto a protección de alimentos para evitar daño o contaminación. Es impermeable, fuerte y flexible; puede adaptarse a una variedad de productos, no es caro y está hecho de materias primas disponibles.